Por: Lluna Fabregat, investigadora del Gabinete de Comunicación y Educación
Numerosos pensadores, escritores, filósofos, artistas y profetas han hablado del viaje como una metáfora de la vida. El escritor estadounidense John Steinbeck decía que no son las personas quienes inician viajes, sino que los viajes inician a las personas. La cantante Naomi Judd aseguraba que hay muchos caminos, pero solo un viaje. Y es que existe una creencia popular compartida que define la vida como un viaje. Pero, ¿de qué forma se relaciona el hecho de viajar con la espiritualidad?
El músico Billy Corgan habla del viaje espiritual como un “viaje de descubrimiento de tu propia naturaleza interna” y de su “recuperación”. Según Buda, “El camino no está en el cielo; el camino está en el corazón”. Cada persona tiene unas creencias diferentes y una manera propia de vivir la vida (o su viaje). Ocurre lo mismo con la religión, a menudo narrada de manera juiciosa o estereotipada.
Por ese motivo, el proyecto “Los caminos del encuentro. Cartografía de rutas temáticas para la recuperación del patrimonio histórico de las confesiones religiosas de España – Un viaje del ayer al hoy”, pretende idear rutas temáticas que fracturen estos prejuicios sobre el fenómeno religioso y apuesten por la sostenibilidad, el respeto y la multiculturalidad para replantear la visión que se tiene sobre el viaje.
Con este objetivo, la organización del proyecto Caminos, coordinado por el Gabinete de Comunicación y Educación del Departamento de Periodismo y Ciencias de la Comunicación de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y con el apoyo de la Fundación Pluralismo y Convivencia, ha celebrado un primer seminario de reflexión para conocer las diferentes opiniones, necesidades e inquietudes de los agentes relacionados con el turismo, el viaje y la religión.
La reunión ha contado con la participación de más de una veintena de representantes religiosos, docentes, periodistas y expertos que han debatido sobre la situación del turismo religioso actual y las posibilidades de renovación, adaptación e inclusión en la representación de otras confesiones religiosas en este ámbito.
“Los viajes desde el principio se remontan y se apoyan en lo religioso. Sin embargo, en el mundo editorial, hay poco espacio para lo religioso debido a los prejuicios y las ideas que hoy se asocian en las religiones”. José Alejandro Adamuz, Editor Adjunto Digital de Viajes National Geographic expone el miedo o rechazo a la palabra “religión” ya que “se asocia a lo antiguo”. Adamuz añade: “Desde el periodismo es undesafío traspasar el doctrinarismo y acercar la experiencia a la enseñanza”.
Uno de los objetivos principales del proyecto es visibilizar las religiones minoritarias y su patrimonio cultural en España. En ese sentido, Rita Gomes, técnica de programas e incidencia de la Fundación Pluralismo y Convivencia, apunta que existe un gran desconocimiento sobre las minorías religiosas de España y sobre su origen. “Hemos crecido y nos hemos construido en lo religioso” constata Gomes.
Por otro lado, Jerónimo Daa Silva, Iagman de la Comunidad Odinista de España- Ásatrú, plantea un nuevo reto. “Nuestro interés es aprender, no por lo que somos, sino por lo que representamos. Los valores se están perdiendo. El enfoque del turismo debe ponerse en los valores de esa espiritualidad, que no es dogmatismo, no es adoctrinar” introduce Daa Silva. “Deberíamos poner el enfoque más allá de un lugar físico o de una raíz patrimonial. Hay cosas que no se pueden recuperar, pero sí reinterpretar” concluye el Iagman de la Comunidad Odinista de España- Ásatrú.
Para conseguirlo, Kutsab Dorje, presidente de la Fundación Monjes Budistas Sakya Tashi Ling, pone en valor la participación de la gente local y su conexión con el visitante. Es decir, según Kutsab Dorje, “debería implicar al residente para que sea el informador”. En este caso, el reto es conseguir que la población residente conozca ese patrimonio que se aleja de su ideología, religión o cultura y lo transmita. Y es que ¿cómo podemos hacer nuestras esas realidades ajenas?
Además, se ha evidenciado la necesidad de aprender a comunicar para llegar a las generaciones más jóvenes, acostumbradas a un lenguaje mediático y digital muy diferente a las anteriores. En ese sentido, Álvaro Laforet, profesor del Máster de Periodismo de Viajes de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), indica que las confesiones religiosas deberían replantearse sus estrategias de comunicación y “aplicar las estrategias de comunicación de las marcas”. A todo esto, David Rull, profesor del Máster de Periodismo de la UAB añade la posibilidad de inventar nuevos formatos.
Para Santiago Tejedor, director del Gabinete de Comunicación y Educación de la UAB e investigador principal del proyecto, el viaje es siempre una oportunidad para aprender y desaprender. “El desafío hoy es edificar una pedagogía del viaje que, desde la otredad, la empatía y la tolerancia nos ayude a entender que son muchas más cosas las que nos asemejan”, apunta. El diálogo interreligioso, añade el docente y periodista, es una oportunidad rica en posibilidades narrativas y experienciales de conseguirlo.
Así pues, la reunión ha logrado su objetivo, nutriendo al equipo investigador del proyecto con nuevas ideas e ingredientes que marcarán el futuro del proyecto: mezclar rutas para evitar el parcelamiento de las religiones, realizar guías transversales para el ciudadano de a pie y potenciar los elementos comunes y la riqueza multicultural y multireligiosa del país para potenciar la diversidad y eliminar las barreras existentes.